Hoy quería poner una receta de esas "curraditas", pero como dice el dícho, la vida es eso que te pasa mientras tú te empeñas en hacer otros planes... y la vida me ha pasado y me ha arrastrado dejando detrás de mi la receta. Podría poner una "de archivo", pero en este momento no le veo sentido, no abrí un blog para poner dos recetas a la semana, sino para expresarme, sacar fuera cosas de los momentos que me apetecíera compartir.
Este en momento en concreto no tengo muy claro que quiera compartirlo, pero me tiene absorbido el cerebro en los últimos dos días, así que no tengo muchas opciones. Hace dos días que lo vi y no hace mas que darme vueltas en la cabeza, un cacharrito nuevo para mi cocina. ¿Que parece un poco obsesivo? Pues puede ser, pero sé que a muchos de los que paséis por aquí os pasa lo mismo... para que negarlo.El cacharrito es un robot de cocina, este robot de cocina:
Y que nadie diga "ah,... pues no es para tanto, si fuera la kitchen Aid lo entendería". Pero es que este cuesta menos de 80 euros, precio razonable para la economía familiar sin tener que endeudarnos en un capricho, y es que no es por desprestigiar a la famosa maquinita (la KA), pero no deja de ser un capricho, precioso, fetiche y demás, pero capricho. ¿Y tanta ilusión? Pues porque tengo un brazo de batidora, una máquina de pasta fresca manual y una panificadora, pero no tengo nada más que me ayude en la cocina, ni siquiera tengo un horno propiamente dicho, sino un mini-horno de estos de resistencia que me regaló mi cuñado cuando se mudó a Madrid. Tampoco tengo microondas, el mio se rompió hace un par de años y nunca se repuso. Y ahora, en un par de días, (sale a la venta el 24, que en Portugal es huelga general... qué incertidumbre...) este cacharrín pasará a ser el nuevo integrante de la cocina... ya tiene hasta su sitio preparado y esperándolo (ayer me sentía preparando la cuna del nuevo bebé).
Bueno, pues con toda esta sensación de emoción-enamoramiento no he podido centrarme en una receta, hasta que se me hizo la luz cuando me vi preparándome un postre de kéfir con manzana asada... absolutamente "cocina medicina". Estaba pensando en todas las recetas que quería preparar cuando tuviera el cacharro en casa y me dio miedo de la sobredosis de azúcar y harinas que eso podría suponer, así que decidí ir preparándome fortaleciendo mi barriguita para la bienvenida, y nada mejor que este postre.
El kéfir es una especie de "cultivo bacteriano" en forma de honguito blanco, parece un trozo de coliflor blandita, y que en resumen es como tomar un actimel extra fuerte, con muchas más bacterias, tanto variedad como en cantidad. Otra de las cosas buenas es que hace mucho más digestiva la leche porque hay que decir que en realidad es una "leche predigerida" por bacterias compatibles con nuestro organismo. Este cultivo se alimenta básicamente de azúcar, es decir, en la leche se alimenta de la lactosa, bajando así el contenido de ésta (además parece ser que aumenta la tolerancia a la lactosa en personas con una intolerancia baja-media porque reflora el intestino de bacterias devoradoras de lactosa). No voy a hablar mucho del kéfir porque hay decenas de páginas buenisimas sobre él. Simplemente en casa llevamos dos años tomándolo y "se nota". Cuando dejamos de tomarlo, por flojera, o porque nos vamos de viaje, o por olvido, sobre todo yo comienzo con las digestiones más lentas, las bajadas de defensas, cansancio... Volvemos a los buenos hábitos y volvemos a la deseada normalidad. Yo comencé a tomarlo poco antes del diagnóstico porque tenia candidiasis intestinal de tantos antibioticos y tanto medicamento a ciegas y no había forma de controlarla... hasta que llegó este bicho a casas:
La manzana asada es relativamente baja en azúcar pero muy dulce, misterios de la naturaleza, y es lo más digestivo y menos agresivo del mundo culinario. Es ideal para tonificar, suavizar y calmar nuestro intestino, y para regular el transito alterado.
La canela reduce los gases intestinales, es un antiácido natural al mismo tiempo que facilita la digestión (otro misterio de la naturaleza más), y es especialmente recomendable en esta época porque ayuda a combatir los resfriados.Como el kéfir es ligeramente ácido prefiero mezclarlo con frutas y compotas de frutas menos refrescantes el dulce de membrillo, manzana o batata al horno... pero eso es al gusto de cada cual.
KEFIR CON MANZANA AL HORNO A LA CANELA
Ingredientes:
- 1 manzana al horno
- 100 ml de kéfir natural
- 1 pizca de canela molida
- 1 cucharada de sirope de arce, o miel, o un poco de azúcar demara...
Elaboración:
Trituramos la manzana cocida, quitándole previamente el corazón (la piel se le quita o no, al gusto y la necesidad de la barriga) y con una pizca de canela molida. Ponemos el puré en un cuenco o vasito. Añadimos 100 ml de kéfir natural, o 200 o lo que quieras. Regamos con una cucharada de sirope de arce. Comemos disfrutando de algo rico, que nos cuida y que nos hace sentir mejor... lo mejor de la cocina.
Otra opción para las noches frias de otoño es tomarlo con té calentito, y así puedo poner esta foto, que es como yo me lo tomé, con una té chino en taza japonesa,... y como quien no quiere la cosa pongo esta lata tan bonita, la de mi te oolong, un regalo de los que me hacen dar saltitos. Gracias, además el té está buenisimo. ¡Buenos días! (o buenas tardes, o buenas noches, pero buenas, buenas)
Pues me parece muy chulo el robot que te quieres agenciar. Normal que te haga ilusión! ¿Por qué no lo ibas a compartir? ;)
ResponderEliminarY ese kéfir!! No se me había ocurrido tomarlo así, que seguro está delicioso! Así que con tu permiso...tomo nota. :)
Muy chuli la maquinita...y pensar que tenía yo una muy similar hace tiempo, que la usaba un montón (algo más robusta, la tuya es muy mona y coqueta), pero llegó la thermomix a mi cocina y éste aparato se fué al trastero...del trastero unos cuantos años después, en una limpieza a fondo, fué al contenedor de basura... y hoy me arrepiento muuucho. Porque muchas veces quieres rayar, o lonchear, o amasar, o hacerte un megazumo con mil frutas etc... y la thermomix lo hace y no lo hace.
ResponderEliminarEa, disfruta de tu cacahrrín y de tu kefir (que esa es otra historia para mi. Quiero y no quiero)
Bicos
Pues tienes razón, celiaquines, porqué no lo iba a compartir, será que todavia tengo que trabajar el complejo de "maruja"... Y eso, prueba así el kefir, que a mi me costó encontrarle el punto pero acabé encontrando mi formula para tomarmelo por gusto más que por necesidad.
ResponderEliminarMarisa, me acabas de dar el empujoncito que me faltaba (bueno, no me faltaba pero me viene muy bien, que soy muy tacaña y tengo que sopesar cada compra de más de 20 euros). ¿Cual es esa historia???? jaja, si tenía que ser obligatorio darlo en las escuelas a menos que lo prohiba el médico.
Besotes!
hummm pero que delicia, que vasito más sanote, me llevo uno que hoy es mi cumple!!! ;-)
ResponderEliminarUn besito y que pases un día espléndido,
Nieves.
Me encanta tu propuesta, el kéfir es muy sano y a mi me encanta. Tengo ese robot hace dos años y te diré que es estupendo, amaso en el el pan y no lo hace peor que otros mas caros... Besos
ResponderEliminarNieves, felicidades con retraso (ahora me pasaré a felicitarte "a tu casa".
ResponderEliminarQué alegría me das Salomé, ayer llegó a casa y se pasó todo el dia trabajando, jeje... hay que probar si viene bien en los primeros 15 días... no? Por lo pronto las pruebas fueron muuuuy bien, pero si me dices que es estupendo me quedo más tranquila y más contenta. El kefir es fantastico,... ya uno más de la familia.
Besotes