miércoles, 30 de noviembre de 2011

EL FIN DE MES AGUDIZA EL INGENIO... O LA CASUALIDAD

Hoy no iba a haber entrada, estaba en ese "I'm not in the mood" (y ahí sigo, pero hay casualidades que merece la pena compartir). Supongo que me va a bajar la regla y no me conozco... ando con pocos amigos y un pelín tirana... tanto, que he decidido que no hacemos compra hasta que comience el mes y acabemos con todo lo que tenemos. Mi marido anda un poco deseando que llegue el día uno (me ha dejado claro que mañana vamos a comprar aunque quede media despensa, seguramente a reponer las provisiones de salchichón, queso y algo de carne que hace días que no comemos). Así que esta tarde, mirando la nevera y la cesta de frutas y verduras... era de pena. Media col lombarda, unos ajos, unas naranjas, una zanahoria, un calabacín, un par de yogures, un trozo de jengibre, un par de huevos, unos garbanzos hervidos que sobraron del potaje, leche, mantequilla... lo dicho, penoso.
Total, toca col lombarda al estilo fin de mes... una sorpresa de esas que te da la vida y descubres un plato que está buenisimo, ¡y no lo sabías!


COL LOMBARDA A LA NARANJA CON GARBANZOS

Confieso que la col lombarda no anda en mi top ten de favoritos de la frutería, pero a veces me da el punto y hago propósito de enmienda para darle más protagonismo en casa... pero entre que yo no la adoro, y que mis queridisimos comensales siempre preguntan que donde está el chuletón... Así que nada, siempre acaba acompañando en una ensalada de coles, o al vapor y salteadas acompañando algo de carne, cosa que en casa sucede poco. Aún así hoy que me he atrevido me he sentido culpable por menospreciar una criatura tan agradecida y mona como estas coles... mira que son bonitas cuando quieren. Después de probar lo buenisimas que estaban me he sentido culpable por no haberme esmerado un poco en darle un poco de estética (haber sofrito los garbanzos a parte con el pimentón y añadirlos al final, hacer los ingredientes por separados y prepararlos como una minitarta o algo así, que de verdad son muy agradecidas y con tres detalles tontos queda un plato de lo más vistoso, no el mio, claro) que para disimular le he puesto una flor con unos garbanzos que quedaron... hay que intentarlo al menos.

Ingredientes:
- 1/4 de col lombarda lavada y cortada finita
- 1 zanahoria rallada
- 2-3 ajos no muy grandes picaditos.
- 1/2 tazón de garbanzos cocidos
- 1/2 vaso de leche + 1/2 vaso de agua
- Aceite de oliva virgen (unos 40 ml)
- Especias: 2/3 cc de sal, 3 granos de pimienta de jamaica, 1/2 cc cominos molidos (o más si sufres de gases, el comino acaba con ellos), 1/3 cc pimentón picante de la vera, 1 poco de nuez nozcada recién molida, una pizquita de canela molida. Todas las especias se muelen juntas en un mortero.
- Medio vaso de zumo de naranja (el zumo de una naranja mediana, pero que esté dulce, de las que dan ganas de comerse a bocados)


Elaboración:
En una sartén honda o wok sofreímos la col y la zanahoria unos 5 minutos. Añadimos los garbanzos y los ajos y sofreímos un par de minutos más. Añadimos las especias molidas, removemos y añadimos el agua y la leche y dejamos hervir a fuego bajo unos diez minutos o hasta que consuma todo el liquido. Removemos bien y probamos para rectificar de sal o de especias.
Añadimos el zumo de naranja y dejamos reducir de nuevo.
Acompañar con trocitos de naranja para ir comiendo con la col. ¿No habéis probado nunca las migas con naranja? Yo ya no como migas pero mis favoritas eran con mucho pimiento, mucha cebolla, choricito y naranja.


Lo mejor es que cuando lo he probado al acabar, me ha abierto los ojos porque no pensaba que estuviera tan rico, pero hace un rato lo he probado frío del que ha sobrado y no sé si me ha gustado más caliente o frío... estupendo porque mañana tampoco hay compras hasta la tarde y sigo comiendo de fin de mes... ¡Qué rico!


**El pan es de hoy, una nueva receta con trigo sarraceno, buenísima. Ya si la repito la pongo otro día, pero el detalle es que lleva simientes de cáñamo,  que es un "superalimento", molidas, y ha quedado increíble de bueno, y aunque no ha subido tanto como el pan blanco de sabor está espectacular y de textura aún mejor. ¡Y además sano! (para que después se me queje la tribu, ¡já!)

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